El PP vuelve a montar el espectáculo, despreciando al resto de la Cámara y con ello a la ciudadanía de la Región, con su actitud basada en el vocerío, las payasadas y bufonadas…desde la tribuna de las Cortes de Castilla-La Mancha.
Con esta forma de actuar que viene siendo una costumbre en esta Legislatura, desprecian las normas, el reglamento y las Instituciones, dentro de la dinámica de trabajo parlamentario que ha impreso De Cospedal.
Considero que el trabajo del parlamentario se puede apoyar en cualquier soporte, sin necesidad de caer en la bufonada, en la caricatura y en el fotomontaje para perder el respeto y el decoro al resto de la Cámara.
Los socialistas también podemos traer al menos cinco pancartas para denunciar la "traición" de la presidenta regional del PP, María Dolores de Cospedal a Castilla-La Mancha sobre agua y el Estatuto, (nos gustaría que mirara más al Tajo que a Murcia) su "desprecio" en torno al ATC, que "no ha movido un dedo" para ayudar a la región, que cobra dos sueldos y que fomenta "payasadas" como las de su Diputado Marín y paranoias como sus propias manías persecutorias.
Exhibir pancartas no está ni bien ni mal, pero cada cosa hay que hacerla en su sitio, y lo hemos hecho los castellano-manchegos: hemos exhibido pancartas en Guadalajara pidiendo que el ATC no estuviera en la región y en Talavera de la Reina (Toledo) diciendo "no al trasvase Tajo-Segura" y, detrás de esas pancartas no ha estado Cospedal. Hay que exhibirlas en la calle, en las Cortes hay que argumentar.
Cada sesión plenaria en el Parlamento regional la convierten en un "circo", en un "show" sin tener respeto por ellos mismos ni por lo que representan las Cortes para la ciudadanía castellano-manchega.
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